sábado, 4 de junio de 2011

PEQUEÑECES.


Pequeñeces
chispas de satisfacción,
el milagro de la nuez
que no estaba hueca,
descolgar y oír tu voz,
un pedazo digno de pan
rico y sobre la mesa.

Menudencias;
la conciencia tranquila,
andar calmo paseando
tranquilidad y dicha
en la violencia agitada
del triste hormiguero.

Cada cual apila su montón.
Unos de vanidad,
otros de oro,
aquel de soledad,
tú de silencio tenso
y me da por soplarlos todos
esparciendo en la brisa
penas, egos, batallas,
dudas, temores, fealdades,
miserias, violencia y desierto
para que el aire se los lleve.

Insignificancias.
La fragancia de la piel amada,
un balón rodando en el patio,
el rabo de un perrillo vagabundo
que baila al ritmo de tu risa
y la lisa templanza azul
del cielo alto de otoño.


¿Qué puede haber más grande?

7 comentarios:

  1. Las pequñeces son las que dan sentido a nuestra vida y tú describes con mucho mimo algunas de las más importantes. Un abrazo, Manuel.

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  2. Qué precioso texto, Manuel.
    Ha sido un placer visitarte

    Abrazos!

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  3. Muy bonito Manuel!
    En estas pequeñeces está la esencia de la vida!
    Un Saludo!!

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  4. Pedro Alonso. Creo que sólo los pequeños detalles hacen la vida grande, por eso es bueno no vivir a carreras y aprender a sentir y a mirar.
    Patricia gracias por la visita. Abrazotes.
    Sucede. Lo mejor de la esencia de las cosas es que no hace falta buscarla. Si te relajas aparece.

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  5. Son esas pequeñas cosas... me encanta.
    Saludillos pequenillos

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  6. Hola Puck! Pequeñas cosas como oir cantar las ranas en la charca. Abrazotes

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  7. Que qué puede haber más grande? pues está claro, TÚ!!!!
    Un gran abrazote!!

    Saravia

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